Primer día de clases… un día en que todos se encuentran presionados y desubicados, sobre todo los nuevos, como yo. Ese día me vi obligada a cargar todos mis libros con mis brazos, por rebeldía no le había hecho caso a mi madre: “Lleva tu mochila”. Pero está vez yo no dejaría que me lo echará en cara, por eso me dirigía casi corriendo a mi casa, antes de que mi madre llegará.
-¡Liz!- Escuché que me nombraban y volteé. Me enfurecí al darme cuenta que no era a mí a quién requerían, si no a la otra chica nueva del colegio.
Al tratar avanzar con la cara mirando hacia la escuela sólo sentí como mis cuadernos volaban por los aires. No reaccioné a tiempo y resbale. Me incorporé rápidamente para reclamarle a esa persona su falta de atención, me negaba a aceptar que en parte había sido mi culpa.
-¿Por qué no te fijas…?-Mi frase que en un principio había iniciado en grito se había ahogado en un suspiro. Era el chico más lindo que mis ojos habían visto.
-Perdón, fue mi culpa- Me tendió la mano para que me levantará. El contacto con su piel me hacía sentir como si volará en las nubes, sus ojos profundos se clavaron en los míos y lo que antes negaba que existía se extendió ante mi…Nunca antes me había pasado. Era mi primer amor a primera vista… lucharía con todas mis fuerzas porque ese hombre fuera mío…
Wendy Amy Cas
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