-¡ Hipócrita!- Le dije a Miriam al contestar mi celular, ya estaba harta de ella.
-¿Por qué?-Su voz se escuchaba angustiada y desesperada.
-Porque no es justo me hables por el cel, y en la escuela no. ESO NO ES SER AMIGAS. Eso es ser hipócrita.
-Tú sabes mis razones.
-No, no las sé Miriam. Y si vas a seguir así, es mejor que acabemos con esta amistad que no vale la pena.
-Pero sabes que a mi sí me importas.
-¡No se nota! Mira... eres una persona que no demuestra lo que siente y eso me hace enfurecerme, así que si quieres arreglar las cosas cambia y no seas hipócrita- Dicho esto colgué y aventé mi celular a la cama.
Algo que yo odiaba era la hipocresía y las mentiras que en parte venían siendo lo mismo.
Sentí que mi celular empezaba a vibrar de nuevo, como suponía era Miriam, deje mi celular hasta el fondo de mi armario para no contestar y decir cosas de las cuales estaba segura que me arrepentiría más adelante.
Me acosté en la cama, mirando al techo de mi habitación, en realidad yo solo tenía una amiga verdadera, la cual estaba segura me apoyaría en los momentos más oscuros, esa era Carolina.
Varias veces ella y yo habíamos hablado de Miriam.
Ella era de otro grupo pero a principios de ese ciclo escolar se había empezado a juntar con nosotras, al principio yo la consideraba ya como una de mis mejores amigas pero ella empezó a cambiar, nos hablaba cuándo quería. Eso no era justo.
Este fragmento es algo que escribí, parecido a lo que yo viví, y mi única pregunta es...¿Por que existen personas hipócritas? ¿A ti no te molesta que te hablen bien y te enteras de que hablan mal de ti a tus espaldas? Eso me ha pasado muy seguido, y supongo que también a ti.
A los seres humanos nos dieron una capacidad que no tienen los demás seres vivos: la de pensar y elegir las acciones que haremos, en cambio los animales actúan por puro instinto. Deberíamos ocupar nuestra capacidad de pensar para identificar y alejarnos de las personas que solo buscan hacernos daño.
-¿Por qué?-Su voz se escuchaba angustiada y desesperada.
-Porque no es justo me hables por el cel, y en la escuela no. ESO NO ES SER AMIGAS. Eso es ser hipócrita.
-Tú sabes mis razones.
-No, no las sé Miriam. Y si vas a seguir así, es mejor que acabemos con esta amistad que no vale la pena.
-Pero sabes que a mi sí me importas.
-¡No se nota! Mira... eres una persona que no demuestra lo que siente y eso me hace enfurecerme, así que si quieres arreglar las cosas cambia y no seas hipócrita- Dicho esto colgué y aventé mi celular a la cama.
Algo que yo odiaba era la hipocresía y las mentiras que en parte venían siendo lo mismo.
Sentí que mi celular empezaba a vibrar de nuevo, como suponía era Miriam, deje mi celular hasta el fondo de mi armario para no contestar y decir cosas de las cuales estaba segura que me arrepentiría más adelante.
Me acosté en la cama, mirando al techo de mi habitación, en realidad yo solo tenía una amiga verdadera, la cual estaba segura me apoyaría en los momentos más oscuros, esa era Carolina.
Varias veces ella y yo habíamos hablado de Miriam.
Ella era de otro grupo pero a principios de ese ciclo escolar se había empezado a juntar con nosotras, al principio yo la consideraba ya como una de mis mejores amigas pero ella empezó a cambiar, nos hablaba cuándo quería. Eso no era justo.
Este fragmento es algo que escribí, parecido a lo que yo viví, y mi única pregunta es...¿Por que existen personas hipócritas? ¿A ti no te molesta que te hablen bien y te enteras de que hablan mal de ti a tus espaldas? Eso me ha pasado muy seguido, y supongo que también a ti.
A los seres humanos nos dieron una capacidad que no tienen los demás seres vivos: la de pensar y elegir las acciones que haremos, en cambio los animales actúan por puro instinto. Deberíamos ocupar nuestra capacidad de pensar para identificar y alejarnos de las personas que solo buscan hacernos daño.
Wendy Amy Cas